Falleció un abuelo y tuvimos que ir a su funeral en la ciudad donde vivía.
Yo no era muy cercana a él, pero bueno tenía que ir. Mi papá tiene una casa ahí
donde llegamos a dormir. Un velorio normal no hay mucho que contar. Pero se
reunió toda la familia, tíos, primos, amigos, etc.
Como les había contado en relato anterior, yo con fama de putilla por lo sucedido
con Samuel. Ya han pasado añitos, pero la familia como que si me mira feo. Mas
las tías, pero no me importa.
Volví a ver a mis primos. En total somos 21 primos, una familia muy grande.
Algunos grandes, el primo mayor creo que tiene 30. Y otros chicos, el menor un
primito bebé de un año. Como que hay mucho espacio entre nacimientos de primos
jaja. Por ejemplo, de los grandes está el de 30, luego unas primas de 28 y 27
años. Luego se salta a una prima de 23, yo de 21 y otra prima de 20. De ahí los
adolescentes entre 12 y 16 años. Y luego los bebes.
Nos la pasamos mucho en casa del abuelo, solo íbamos a la casa a dormir. Luego
me la pasaba más con las dos primas cercana a mi edad, hablando de cosas de
chicas y los primos ahí jugando futbol o en sus cosas de hombres.
Luego mis primas se ocupaban, ya saben pueblo machista, las ponían a
cocinar y hacer cosas para los invitados. A mí no, porque soy consentida de mi
papá y no me obliga a nada de eso. Estaba aburrida sentada sola en una banca
afuera de la casa del abuelo. Entonces vi que mis primos salían de una tienda
de la esquina con papitas, refrescos. Eran seis de mis primitos adolescentes
que nunca se despegaban. Les pregunte ¿Qué haces chamacos? Y me dicen que iban
a la cancha y yo de, los acompaño, por que si andaba bien aburrida.
Su cancha no era cancha. A la vuelta de la casa de mi abuelo, es un
terrenote enorme lleno de yerbas bien altas, todo abandonado. Por una brecha
entramos y en medio del terreno había una construcción. Yo creo que fue un restaurant
en algún momento, solo un piso muy amplio, con una barra de concina al final,
sin paredes, solo unos palos como secos como postes, creo que era como una
palapa.
En la barra pusieron todas sus chucherías y comenzaron a charlar y
botanear. Y luego se les ocurrio jugar futbol, les dije que ese juego era
aburrido jaja, y los groseros me dijeron, ¿y eso a nosotros que?
Les propuse jugar a los quemados. Ese juego de correr y estar cazándolos aventándoles
el balón. Dijeron que okey, para variar un poco. Y nada, comenzamos a jugar, a
mi me encanta ese juego. Lo malo que yo llevaba un vestido. Y siempre me andaba
cuidando de que no se me vieran los calzones jajaj.
Pero era inevitable que mientras saltaba, no se me viera un poco mi calzoncito
de encaje. Hasta en una ocasión caí de rodillas y quedé bien empinadota
mostrando culo. Mis primitos encantados seguramente, toda sudada y mostrando
calzones.
Uno de ellos llamado Oscar, yo digo que no es muy normal que digamos.
Siempre dice incoherencias y no se mide al hablar. El asi casual me dijo, ¿te
gusta mostrar calzones prima? Dicen que eres putilla. Pero no lo dijo como
morboso, lo dijo como algo normal. Yo me reí por que ya lo conozco. Les dije
que me iba, pero me convencieron de quedarme a jugar un ratito más.
Antes de seguir jugando, nos fuimos a la barra a tomar y comer algo. Yo tomándome
un yogurt, me dice Luis el mas pequeño. Prima ¿podemos ver tus calzones? y yo me
le quede mirando. Pero que cosas dices, ¿no conoces los calzones? les dije.
Me dijeron que sí, pero no en una mujer puesto. Les dije ¿Por qué me piden
eso? luego me dicen, por que igual y a ti no te molesta. Y pensé, en serio
creen que soy putilla.
Todos vírgenes los primitos. Les dije que estaba bien, solo por ser
familia. Me puse de frente a ellos y me levanté el vestido. Mi calzoncito rosa
de encajes y se me veía un poco la conchita en partes semitransparentes. Oscar
hasta se agachó a ver mas de cerca. Me di la vuelta mostrando mi culo, ellos
dijeron que les gustaba mas esa zona, y me incliné para ellos. Como traían
shorts, se les notó que se les paró con eso. Ahí comprobé que si era medio puta jajaj me
gustaba que me morbosearan. Mi padrino me había pervertid mucho.
Luis fue el único que estiró la mano y paso el dedo sobre el calzón. Luego
se me acercó y comenzó a untarse sin quitarse su ropa, como si me estuviera
cogiendo. Un faje sobre la ropa, Me acomodé un poco empinada sobre la barra,
mientras mi primo estaba atrás restregándose. Luego otro me preguntó si también
podían. Les dije que estaba bien, que íbamos a jugar al fajé.
Uno a uno pasando a untarse en mi culo, yo tomándome mi yogurt dejando que
se sirvieran. Pero se sentía bien rico que me mojé. Ellos notaron mi calzón húmedo
y comenzaron a pasar su dedo y a olerlo. Les pregunté ¿quieren oler mi panocha?
Dijeron que si. Me bajé el calzón hasta media pierna y me volví a empinar. Yo
sudada jajaj era como una broma según yo, pero a ellos les estaba gustando.
Comenzaban a oler mi puchita sudada. Pero estaba mas húmeda por mi excitación
que por el sudor.
Les dije que podían untarse con su boxer. Se quitaron los shor y en boxer
siguieron untándose en mi panochita desnuda. Con los boxer estaba mas rico, por
que aunque con tela, entraba un poco mas sus vergas.
El relajo comenzó con Oscar. Que traía un boxer blanco con imágenes de Van Disel
de rápidos y furiosos jajaj. El untándose casual y yo gimiendo. Pero su bóxer
tenía un agujerito. Sentí como que algo mas rico y húmedo. Miré, el agujero no
era tan grande como para que se le saliera el pene. Pero en ese agujero se veía
el ojito del pito jajaj todo baboso. Me agaché y comencé a pasarle la lengua,
el diciendo ¡Que rico! Yo parecía que andaba lamiando el chiclecito asomándose
por el caramelo.
Luego me empiné, pidiendo que me untara eso. En serio estaba bien rico, el
rose por mi panochita húmeda. Pero creo que por la humedad el pito, cuando me
di cuenta ya se había salido más. Una cuarta parte de la cabecita como
desodorante de bolita.
Yo excitada de asi, primo sigue untando tu verga, me encanta. Luis se sentó
en la barra sin nada, con su verga parada. Me arrimé hacia él y comencé a chupársela,
los otros se subieron tambien. Y asi tenía cinco vergas paradas, yo pasando a
chupar una por una. Oscar seguía atrás untándose. Le dije a Oscar que se
subiera tambien, pero con el boxer. Cuando lo hizo, le abrí un poco mas el
agujero y saqué su verga por ahí y comencé a chupársela.
Yo no aguanté, me trepé a la barra sin calzones, solo con mi vestido. Les
dije, ¡me los voy a coger! Jaja se me ocurrió decirles que se acostaran boca
arriba en fila sobre la barra. Un caminito de seis vergas una después de la
otra. El primero, me fui agachando encima y untando mi panochita. Era mi
primito Iker que miraba como mi panochita húmeda se restregaba en la punta.
¿quieres panocha bebe? Le dije, me dijo que si con la cabeza. Y me fui clavando
despacito agachada sobre de él.
Los otros se sentaron viendo cómo me clavaba en esa verga. Yo excitada viendo que estaban para mi solita.
Unos minutos y me pasé al siguiente, Oscar. Clavándome rico haciendo sonar mis
nalgas en el choque. Asi fui pasándome uno a uno, cuando andaba en el último,
me pidieron que me pusiera en cuatro. Como ellos tenían miedo de caerse, nos
bajamos al suelo tras la barra. Ahí comenzaron a turnarse dándome toda su verga
hasta el fondo.
Chupaba una verga mientras recibía otra. Lo gracioso que llegó un borracho
que me asustó. Pero bien sucio, un indigente. Mis primos se detuvieron un
momento, me dijeron que era como el indigente del pueblo, que era tranquilo. El señor no hablaba, solo hacia señas como diciendo,
se la andan cogiendo, luego hacia su pulgar arriba y les daba palmadas a mis
primos en el hombro, dando su aprobación jajaj.
Le dieron de comer unas papas. Mis primos siguieron dándome de perrito, yo
gimiendo y el indigente observándonos. Pero no estaba como caliente ni nada,
solo nos miraba mientras comía. Les dije a mis primos que no se corrieran adentro,
ahí cuando iban a venirse, iban a jalárselas a orillas del monte a echar toda
su lechita.
Estaba distraída chupando verga, si sentí la peste en serio. El indigente
con el pito afuera toda llena de pelos, rosandola en mi culo. Me puse de pie,
le dije que no. Mis primos convenciéndome de ¡dale chance! Y yo de noooo. Incluso
me daba asco.
Agarre agua que llevaron mis primos y me lave el culo donde rosó el señor.
Eso me apago, ya me puse el calzón y mis primos rogando que me quedara, pero me
fui de ahí.
En la comida mis primos viéndome, como suplicando que se repitiera. Lo malo
para ellos, es que yo me quitaba en la noche. Mi papá siempre viaja en la
madrugada. Ya no se repitió y me regresé. Pero ya por mensajes y todo quedé en
que si les iba a dar chance. En semana santa casualidad que vendrán a visitarme,
cuando antes ni me pelaban jaja.
Necesito una mujer como tú para coger con varios vatos y varias mujeres 🤩🤩🤩
ResponderEliminar