2-ANDREA (historia de año nuevo 2 de 2)

Tenemos dos historias de año nuevo, algo similares. Subimos las dos a ver cual les calienta mas: 


Lo más reciente. Primero que nada, Mi esposo de mente abierta se fue a estados unidos a probar suerte. Terminamos en buenos términos mejor asi, él libre y yo libre. Por el momento responsable, ya que les manda dinero a sus hijos, aunque no estemos juntos. Nos divorciamos, por si encuentra una gringa por ahí, pueda casarse jaja. Por mi parte me junté con un hombre de 40 que se dedica a la herrería. Ya vivimos juntos, le digo que es mi esposo. Mis hijos ya saben, aunque andan molestos conmigo, lo aceptan.

Pero ya desde antes, yo andaba con el Herrero. Mi ex esposo sabía, pero mi amante herrero pensaba que le era infiel a mi exesposo. A él le excitaba ser el amante, el sancho jajaj Ya que se fue mi ex esposo, formalizamos. El me da dinero solo para mí, ya que mis hijos tienen suficiente con lo de su papá. Entonces cuando me refiero a mi esposo, hablo del nuevo.  

Pues a mi esposo lo llamó uno de sus amigos para pasar año nuevo con ellos. Aprovechando que mis hijos están de vacaciones con sus abuelos, papas de su papá. Por lo que aceptamos, mi esposo compró cervezas y botanas. Su amigo de familia muy pobre jaja, los que viven en Cancún sabrán, ahí por esas colonias alejadas como el Milagro. La verdad no sé qué colonia es, pero por esos lugares donde es más monte que casas. El taxi nos cobró un dineral, pero bueno no me desvío.

Su casa asi de bloques sin repellar, ósea se veían los bloques. Techo de lámina y nos recibió en su patio de enfrente. Creo que va a construir por que tenía bloques acomodados alrededor como especie de barda. Y nada, estaba su esposa y un hombre más, amigo de mi esposo tambien, con su esposa. Luego llegaron dos mas solos. Pues hicieron carnes asadas, yo platicando con las dos señoras y los cinco hombres en su charla siempre de trabajo.

Llegamos como las 8pm. Bebiendo, conviviendo, bailando un poco. Podíamos hacer escandalo ya que a los lados y en el frente, puro monte, no vivía nadie. Había más casas, pero como a tres lotes más. Ahora bien, el problema era el baño. Los hombres ahí se iban a un montecito que estaba a lado. Pero la señora de la casa nos ofreció a mi y a la otra invitada, pasar al baño de su casa cuando quisiéramos. Pero su baño estaba dentro del cuarto de ellos. Al principio nos daba pena entrar, pero ya con unas cervecitas de mas agarramos confianza.

La otra pareja se tuvo que marchar como las 10pm, por que tenían otro convivio. Por lo que solo me quedé charlando con la esposa del dueño de la casa. Luego se fue uno de sus amigos, se quedaron solo mi esposo, el señor de la casa y su otro amigo. Ya pedos como las 12:30 am, y la señora de la casa, no sé, me pareció grosera por que como a la 1 am se fue a dormir dejándome con ellos. Igual no la juzgo, luego sé que como ama de casa, a veces es la primera en despertar con eso de las compras y la comida. Igual y estaba cansada.

Me dijo que iba a dejar la puerta del cuarto abierto, para que pudiera entrar al baño. Pero me dio mucha pena molestar. Por lo que cuando me daba ganas de mear me iba al fondo del terreno tras un arbole enorme. Los amigos de mi esposo bien morbosos, viéndome el culo cuando me paraba. Igual le estaba dando show a los amigos de mi esposo, incluyendo al dueño de la casa. Ya borrachos, mirándome las piernas cuando estaba sentada. Mientras mi esposo estaba en el montecito, el señor de la casa me sobó la pierna diciéndome, que bonito tatuaje. Y yo de gracias. Me calentaba que me morbosearan. No le daba pena en estar sobándome la pierna, admirando mi tatuaje, mientras el otro solo miraba sonriendo pícaramente.

Luego comencé a bailar con ellos. Se turnaban, uno platicaba con mi esposo y otro bailando conmigo. No intentaron nada, porque mi esposo estaba de frente y nunca nos quitaba la mirada. Pero si me susurraba, Esta bien buena, que suerte tiene su esposo de tener ese culito. Y yo me reía, si me porté coqueta.

El dueño de la casa se fue por unas cervezas, como a los 10 minutos me dio ganas de mear y me fui atrás del árbol. El patio de atrás y adelante estaba separado por la casa, se accedía por un pasillo. Estaba agachada cuando escucho en el monte pasos. Volteó y era el señor de la casa diciéndome ¿la ayudo? El astuto, tomó un atajo por el montecito de a lado, y me estaba esperando ahí. Y lo mejor, estaba sin pantalones y con la verga parada. Yo me reí, le dije, se te va a meter una serpiente por el culo jajaj. Pero sacó unas servilletas de la bolsa de su camisa, yo me puse de pie y me apoye en el árbol con las nalgas arriba y mi calzón abajo. El comenzó a secarme la panochita con las servilletas. Y me dijo, mejor te lo lavo y se agachó a lamerme la panocha.

Al principio yo tenía pena, ya que tanto orinar no se como la tenía jajaj. Pero el chupándomela, diciéndome que olía delicioso, ¡a hembra! Y me dijo, tu esposo anda bien alerta, voy a empedarlo. Le dije que el no se emborrachaba rápido, pero me dijo, tengo mis mañas. Comiéndome el culo, pero si, mi esposo se asomó por el pasillo. Ya el dueño de la casa se fue por el monte y yo me agaché de nuevo. Mi esposo me vio preguntándome porque me tardaba, le dije que eran las cervezas. Y ya me regresé con él.

El que si se emborracho rápido fue el otro amigo de mi esposo, Estaba roncando en su silla, cuando mi esposo se iba a mear, el señor me tocaba las piernas diciéndome que me la quería meter, que tenia el olor a mi panocha en su nariz todavía. Yo estaba caliente, metía sus manos bajo mi vestido a sobarme la concha sobre el calzón. Le decía que su esposa iba a despertar, pero me dijo que que estaba deliciosa, no podía evitarlo.

Me pidió que cuando fuera a mear, me quitara el calzón para poder agarrar mejor. Lo hice, metí mi calzón en mi bulto y asi regresé en la siguiente vuelta. Cuando mi esposo de nuevo se fue al baño, ahora si el señor tocó mi panocha libre. Se calentó que sacó su verga abriéndose el cierre del pantalón, me incliné a chupársela un poco mientras el estaba alerta. Calculábamos mas o menos cuanto se tardaba mi esposo.

Entonces el otro amigo despertó. Y el señor de la casa dijo que iba a conseguir cerveza clandestina cerca, pero me miró como diciendo, te veo en el árbol. Y salió y esperé cinco minutos y fui a mear. Llegué y el salió entre las yerbas sin pantalones, me sorprendía que no se le pegara nada jaja.

Me bajé a chupársela, pero me dijo que no había tiempo. Me empinó apoyándome en el arbol, paso su rica verga entre mi vagina, luego fue metiéndola. Yo abrazada del arbol jaja y el dándome verga, gemía pidiéndole más. Se le salió decirme que él se había cogido a todas las parejas de mi esposo. Y yo de ¿Cómo? Me dice, el siempre se fija en putas.

No me dio tiempo de analizar esa información, yo caliente recibiendo verga. Nos calentamos tanto, que no medimos el tiempo. Su verga entrando y saliendo en mi panocha húmeda, hizo que me corriera, pero el no paraba. El se corrió dentro de mi, lanzó un grito, lo bueno que no escucharon. Hice pipí para sacar el semen, me limpie con toallitas húmedas que traigo en mi bolsa y regresé.

Mi esposo debatiendo con su otro amigo, cuando está borracho se cree intelectual que se distrae en esas cosas.

El señor de la casa regresando con cervezas y a seguir la fiesta. Lo que mas me encantó, que mi esposo fue a mear, y el señor de la casa dijo que me pare. Lo hice y me subió el vestido, no tenía calzones, me sorprendí por que el otro amigo estaba ahí. Pero el otro no se sorprendió, estaba tan ebrio que desparramado en la silla solo veía y decía, luego yo sigo y bebía y miraba al cielo las estrellas jaja.

El señor de la casa diciendo, ni se va acordar de lo que vio. Sacó su verga y me empinó sobre la mesa tirando latas al suelo. Comenzó a metérmela ahí mismo y yo diciéndole, ¡nos verán! Por que la calle se veía en la entradita entre los bloques que acomodó de barda. Dijo que ya nadie pasaba, los vecinos estaban dormidos. Y azotándome como la zorra que soy, Y yo de si papi, dame verga.

Pero no terminábamos, parábamos esperando que mi esposo se asomara. Solo eran metidas rápidas. Pero eso me puso mas cachonda, saber que cuando mi esposo iba al baño, me iban a meter la verga hasta el fondo. Incluso me chuparon culo y panocha, me dedearon, chupe verga, en cada vuelta era algo delicioso.

Hasta que mi esposo no regresó. Fui a ver que había pasado y de camino de regreso se había acostado sobre un sumidero de concreto a dormir. Ahí en el pasillo, cuando lo vimos, el señor de la casa dijo ¡Al fin! Y comenzó a quitarme el vestido por arriba. Comenzamos a besarnos ya con mas confianza y el se quitó los pantalones. Me bajé a mamar su verga que estaba bien mojada y oliendo a panocha.

Pero el quería cogerme de nuevo. Me puso contra la pared y ensalivó mi culo y comenzó a metérmela por ahí despacito. Me dolía un chingo, pero aguantaba por que quería sentirlo. Ya todo adentro, comenzó a cogerme analmente y yo hasta lagrimé jaja, pero mi culo todo abierto, luego comencé a sentir rico. Y me juzgarán, pero ver a mi esposo como a tres metros, me calentaba más.

Paso de mi culo a mi concha. Batiéndome adentro de nuevo, me vine bien rico, y el no paraba de darme duro. Al final se corrió dentro, estaba bien caliente tambien, sentí litros de leche llenándome.

Regresamos a la mesita a beber unas más. Mi esposo en el sumidero lo dejamos. Al señor de nuevo se le antojó y esta ves de sentones. En su silla comencé a clavarme, él apretándome tetas. No tardó y de nuevo lechita dentro, otro litro.

De ahí me fui emborrachando. Que ya no recordé más. Y desperté en mi casa, mi esposo despierto con dolor de cabeza. Ninguno recordaba ese lapso de borrachera. El piensa que cogimos, por que dice que vio mi vestido tieso por semen, no recuerdo a que hora me mancharon la ropa. Pero en fin todo salió rico.




Comentarios

  1. No manches donde conozco a estás mujeres?
    Cuántas ganas de detonarme a una de ellas sus historias bien calientes

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