98 ANA JULIA, haciendo feliz a dos obreros.

Inicie una nueva relación. No me juzguen se que soy dependiente jajaja. Vivimos juntos un par de semanas, hasta que mi hijo literalmente lo corrió. Casi lo golpea, mi nuevo novio por su parte bien respetuoso no hizo nada. Pero desde entonces lo dejamos asi, seguimos de novios. Pero por el momento cada quien, en su casa, mientras arreglamos la situación.

Mi hijo quiso vivir conmigo nuevamente. Su papá lo dejó y pues solo vivimos el y yo en la casa. Noto que se pone celosito con mi novio. Yo pensaba, es normal todos los hijos celan a su madre. Pero me olvidaba que no tenemos una relación normal de madre e hijo. De hecho, mi novio que no sabe nada, piensa que igual son celos normales de hijo, por eso pone un poco de espacio, según el se lo ganara primero.

Pues igual me he tomado descansitos del trabajo, para despejar la mente y saber que hacer. Pues con un poco de lo que ha sucedido, ahora si les cuento.

Para relajarme ahora acostumbro subir en la azotea a tomar el sol, o leer un poco. Normalmente subo en bikini, para aprovechar mejor el bronceado. Construi una pared perimetral en la azotea de 1.40 metros, para tener un poco mas de privacidad. Asi puedo andar en bikini, a veces en lencería a tomar el sol y no me ven. Al menos que este de pie, ahí solo me podrían ver la cabeza. Además, puse un techo de lámina. Asi no me ven en la casa de a lado que es de rentas y es de tres pisos. El sol lo tomo cuando viene de frente, no directo.

La casa del otro lado, casi siempre esta vacía. Aunque un día, como las 10 am subí a relajarme un poco. Con mi tanguita cachetera jajaja. Y veo que había unos albañiles trabajando en el techo de esa casa. Y yo pues exhibicionista, me acosté en mi camastro y me dispuse a leer. Luego me doy cuenta que se asomaban por detrás de la pared, según ellos como trabajando de ese lado. Pero solo me andaban morboseando. Asi acostada, abrí un poco las piernas, para que me vieran un poco la tanga. Luego me acosté de espaldas para que me vieran las nalgas.

Ellos eran dos, un señor como de unos 50 y otro más jovencito tal vez unos 18 o tal vez menos. Como sabrán, me llamo mas el jovencito. El señor era gordo, pero con unos brazos fuertes y el chico delgado pero correoso. Ese día no paso mucho, ellos trabajando y yo acostada ahí como media hora. Luego ya me tuve que ir a mis labores.

Pero al día siguiente, subí con un top de licra y una tanga verde, un poco abierta abajo en una forma de mariposa. Ellos no estaban, pero escuchaba ruidos de golpes, supuse que ahí andaban trabajando. Por lo que solo me acosté a leer y abrir piernas. Pronto se asomo el señor, si escuche su susurro ¡ahí esta la mamacita! Jajaja poco discreto. Solo veía sus cabezas, luego uno de una esquina y el otro en la otra esquina. Yo traía lentes, no podían ver hacia donde miraba. Pero les juro que por el movimiento, supe que se la estaban jalando. Y yo de pinchi albañiles puercos jajaj.

Pero yo bien excitada, abrí mas las piernas que un labio de la vagina se me salio por un costadito de la tanga. Fue donde me puse de pie y les hablé. Ellos rápido se detuvieron, los interrumpí jajaj. Asi de pretexto, les dije que, si me podían ayudar con unos precios, tenia un proyecto en mente y no sabía como cuanto me costaría. El señor fue quien comenzó a explicarme. Yo me subí un banquito que tenía ahí y di un brinco para sentarme en mi paredcita. Un poco incomoda, pero me aguantaba jajaj. El albañil no pudo evitar verme las piernas y el otro las nalgas. Como cerca estaba mi tinaco. Puse la pierna apoyada ahí como para no caerme, pero quede bien abiertota. Pues el albañil se dio cuenta que andaba de exhibicionista. Me dijo, que bonito calzoncito se carga, su esposo ¿no la regaña? Se le ve un poco la pucha. Y yo le dije , no, pero que bueno que le guste.

Le dije ¿quieres tocar mi tanguita? Y el albañil de ¡claro! Pero le dije primero que se lavaran las manos jajaj. Tuve que primero acercar una manguera, con jabón neutro y antibacterial que ahí tenía. Los dos lavándose bien las manos, Yo nuevamente me senté en la pared. El señor se me acercó y comenzó a acariciarme la conchita por arriba del calzón. Sus dedos gruesos y duros. No conforme, siguió acariciándome las piernas, diciéndome, ¡usted esta bien buena! Yo mirándolo excitada, luego me dice ¿no es una broma verdad? Usted parece actriz, que tal si me sale que nos están grabando para esas bromitas de tiktok jajaj. Le contesté, nada mas que sea para un canal porno jajaj.

El comenzó a besarme el abdomen, diciendo que si era broma, al menos iba a aprovechar un poco. De pronto unas manos desde atrás agarrándome las tetas. Era el albañil jovencito, metio sus manos en mi top y comenzó a apretármelas.

Yo bien incomoda, sentía que me iba a caer jajaj. Pero el chico se trepo en la pared tambien, pero el quedo montado y me agarro por detrás como respaldo. Yo me acomodé en su hombro, puse de lado la cara y comenzamos a besarnos bien rico. Apestaba a sudor el chamaco, pero eso me hacia mojarme más. EL señor ya metiendo mano en mi tanga, diciéndome ¡ya andas empapada mi amor! Yo en el beso, mojándome cada vez más.  Luego el chico, puso mi mano tras su cuello y comenzó a chuparme una teta, mientras el señor comenzaba a lamiarme la panocha, haciendo un lado mi calzón. Yo ya bien puta gimiendo, siendo manoseada por dos albañiles.

Les dije que se pasaran a mi azotea. Yo me bajé y me incline a acomodar un poco la toalla que tenia sobre el camastro. Cuando el señor que ya se habia brincado, comenzó a untarme su verga ya sin pantalones, diciendo ¡hay mamacita, te voy a romper ese panocho! Comencé a untarle las nalgas, sentía su verga mojada. El chico se sentó en el camastro igual sin pantalones, pidiéndome que se la chupara. Cuando acerque la cara, le apestaba jajaja. No me enojé, era lógico, andaban trabajando bajo el sol.

Les dije que se desnudaran por completo. Cuando lo hicieron, los puse de pie diciéndoles que les iba a lavar las vergas. Y con la manguera les echaba agua y los untaba de jabón neutro, sus vergas siempre paradas, les encantaba que los estuviera lavando jajaj. Les bajaba el pellejito para lavarles la cabecita. Si estaban bien sucios, pero ahí tallándolos suavecito para dejarlos limpios. Los enjuague y ya oliendo rico y limpios, comencé a chupárselos. Las dos vergas enfrente, yo facinada babiandoselas. El albañil hizo que me pusiera de pie, me agarró por la cintura y comenzó a besarme el cuello y la boca. El jovencito comenzaba a bajarme la tanga, luego a abrirme las nalgas para comerme el culo. Haciéndome sándwich, los dos untando sus vergas y yo diciendoles ¡ya quiero que me la metan papacitos!

Le dije al chico que se acostara en el camastro. Cuando lo hizo yo lo monte, clavándome despacio en su rica verga gruesa. Ya adentro, ambos mojados comencé a mover la cadera despacio de adelante hacia atrás, sintiéndola adentro. Luego solo comencé a chuparle la verga al otro, y yo excitada de ¿les gusta papi? Que se hayan topado con una puta en la azotea. Me quede agachada arriba de la verga del jovencito y el comenzó a clavármela rápido. Yo gimiendo, con la otra en mi boca. El señor me dice, un muchachito nos andaba viendo asomándose por su escalera. Y yo en la puteria, no pensaba solo quería disfrutar. Le dije, ha de ser mi hijo, pero no se preocupen, sabe que tiene una mamá golfa. El chico en ese momento se corrió dentro, y el albañil diciendo me toca.

Pero antes con la manguera, me hecho agua en la panocha jajja. Yo con mi mano me la lavaba con el jabón. Luego dijo, ya esta limpia de los mecos del chalan jajaja y se me subió a cogerme tambien. Me encantaba el jovencito, pero el señor cogía mas rico, hacia sonar mi panocha fuerte y tenía buena condición física, metía, sacaba repetidamente, hasta que hizo que me viniera. Todavía sentí que el señor se corrió, pero no perdía la erección, seguía cogiéndome duro. Hasta que dijo ¡ya no puedo! Y se paró todo cansado diciendo ¡uff! Nunca me habia cogido una señora fina jaja. Le dije que no era fina, Era mas naca y cochina de lo que parecía.

Nuevamente ahí me lavé con el jabón neutro y la manguera. Ellos igual hicieron lo mismo, pero tuve que despedirme, ya los había distraído mucho. Me dicen ¿mañana vuelve? Les dije que si jajaj. El mayor, hasta me pidió mi calzón de recuerdo, pues se lo di.

Bajé a la casa sin calzón jajaj. Mi hijo estaba en su cuarto jugando con su Xbox. Sabia que me vio, pero el sabe como soy, solo entre a preguntarle si iba a comer algo. Asi molesto me dice ¡estoy arto de tener una mamá puta! Le das las nalgas a cualquiera. Y yo asi de ¡hóyeme chamaco, mas respeto que soy tu madre! Se pone de pie, se me acerca, se quita el short y me dice, empinate, quieres ser una puta, pues adelante.

Lo volví a regañar, que no me hablara asi. Pero ya esta grandecito, se fue hacia atrás de mi, me agarró de la cintura, me medio empino y comenzó a penetrarme bien duro. ¡es lo que quieres! ¿verdad pinchi puta? Que te metan un sinfín de vergas. Y yo de ¡no me hables asi! Pero con voz excitada, me estaba gustando como me andaba cogiendo. Casi a empujones me fue llevando a la cama, hasta tirarme y hacer que me ponga en cuatro. El siguió cogiéndome de perrito, ¡toma mas verga! me gritaba, yo ya entregada, contestándole, si bebe, dale mas verga a tu madre, te amo y quiero que disfrutes mi concha al máximo. Se recostó sobre de mi, y yo me baje acostándome boca abajo y el arriba siguiendo dándome verga. Creo que hasta los albañiles escucharon mis gemidos, mi hijo empujando duro, ya es un experto cogedor. Si le dije: que afortunadas las chicas que te cojas amor, lo haces delicioso.

No sé si porque somos madre e hijo o es pura casualidad. Pero pasa algo raro, siempre que cogemos, nos venimos casi al mismo tiempo. Derramé mi chorro y sentí su leche. Ambos ya sudando.

Y ya tranquilos, le dije, que feo me hablaste, recuerda que soy tu mamá. Pero me dice que si le molesta que coja con cualquiera. Y me dijo, me tienes a mi, por qué quieres más.  Si me preocupo eso que dijo. Le dije, por que eres mi hijo, te amo, cogemos rico pero es diferente. Igual necesito hombres, asi como tu necesitas mas mujeres que no sean tu madre. Se quedó callado serio, pero ya le dije que debía entender eso. Me pregunta ¿crees que es enfermizo que te cele? Yo me carcajeé, le dije ¡amor! Ya es enfermizo que cojamos. Pero me prometió que ya no se meterá mas en mi vida sexual. Como ya cumplio 18 años, le dije que iba a preguntar a los del club si podía entrar como miembro. Él se emocionó, diciéndome que le encantaría, jajaj. Y pues en eso quedamos con mi hijo. Si puedo les contaré si fue aceptado.

 




Comentarios

  1. Cada día te admiro más, tus historias describen a la perfección el nombre del blog, a cualquiera encantas y enamoras.
    Saludos...
    Alucard

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