25. VERACRUZANA diario25

Los primeros años de casada lo pase bien, al ser mi esposo muy liberal como yo, entramos a un club swinger, íbamos a ricas orgias donde conocí personas que nunca pensé, les diré que ahí vi gente conocida, no diré nombres, pero si algunos políticos y uno que otro miembro de los medios de comunicación local. Ya que mi esposo era de dinero y sus amistades también igual me comencé a codear con gente según de clase pero más guarra zorros y zorras. En las orgias contrataban modelos extranjeras y para algunas mujeres chavos hermosos. Al principio me encantaba, pero aunque no lo crean tanto repetir una pierde el interés. Ya que tenían fechas, horas y todo bien planeado, la verdad a mí me gustan las cosas más espontaneas. Tanto así que seguía teniendo mis encuentros ricos y espontáneos como a mí me gustaba. Seguía cogiendo con los empleados que trabajaban en la casa, claro sin que mi esposo lo supiera o los despedía. Bueno no eran muchos, solo era el chofer, que era nuevo en ese entonces, un señor yucateco. También estaba el que siempre llamaban para mantenimiento de cualquier cosa en la casa.
Pues con el nuevo chofer cuando llego el señor se veía algo tímido, yo le dije que lo contrataba y le iba a pagar un extra, pero le avise que yo de repente estaría con otros chavos, el me llevaría y todo pero que permaneciera callado, él se sorprendió pero acepto. Entonces el me llevaba por el ejemplo a moteles donde esperaba mientras yo subía con algún amante. Un día a uno de esos amantes que era un amigo plomero que yo conocía desde antes, se le ocurrió ir a coger a la orilla de una playa. El chofer nos llevó ese día él se quedó en el coche y mi amante y yo bajamos, y tras unos arbustos a poca distancia él se bajó los pantalones y yo la falda, solo desnudos de abajo los dos. Y empinada me comenzó a coger delicioso, yo gemía y le pedía más duro. Me di cuenta que el chofer trataba de vernos estirando la cabeza para tener buena visión. Mi amante me dijo vamos a darle show al guey, y me saco del arbusto y así a la vista del chofer que estaba a algunos metros, me puso a gatas sobre la arena y comenzó a cogerme de perrito. Eso me excitaba mucho que comencé a gritar de placer, el se fue a buscar una toalla en el coche, regreso con igual con una botella de agua, puso la tolla y me acostó boca arriba con las piernas abiertas, con el agua comenzó a mojarme la panocha y su verga diciendo que para que no se colara arena. Me metió la verga que grite, se movía rico, me bajo la blusa y se pegó a mis tetas como garrapata. El caso es que cuando terminamos, nos vestimos y de nuevo regresamos a la ciudad, dejamos a mi amante en su casa y el me fui con el chofer. En el camino yo le dije que recordara que nada de decir nada a nadie, el solo me decía ok.
Fue entonces cuando el detuvo el coche y voltio a verme diciéndome palabras más palabras menos que llevándome a coger con mis amantes y verme como me visto y el cuerpo que tenía el comenzó a desearme mucho, que no le importaba si lo despedía pero tenía que intentarlo y ese día que me vio cogiendo fue la gota que derramo el vaso el no aguantaba más, ahí me pregunto si él tenía posibilidades de  cogerme ya que se dio cuenta que me gusta el sexo, si yo no aceptara pues que simplemente renunciaría porque era una tortura verme y no tenerme. Y yo para torturarlo un poco más le dije que solo era mi chofer, pero el comenzó casi casi a rogarme, solo una vez, y el típico solo la puntita. Yo le dije haciéndome del rogar que me pedía mucho, pero que si quería solo una mamadita le daría y con eso debería conformarse, él dijo que sí.  Llegamos a la casa le dije que me siguiera para que no nos vieran, ya que su cuñada hermanita de su esposa trabajaba igual de limpieza y ahí estaba. Nos fuimos al baño y ahí le baje el pantalón y me metí su verga en mi boca, ya la tenía bien mojada por su excitación. Comencé a chupar todo cabía en mi boca,  afortunadamente otra cosa que la naturaleza me dio fue una lengua larga que se movía flexiblemente jejeje. Con mi lengua lamieaba, me atreví a lamer bajo sus huevos y mordisquearlos un poco, ya le tenía toda la verga empapada el disfrutaba por los ojitos que ponía. Él me dijo que quería metérmela, yol e dije que habíamos quedado solo en una chupada, pero él dijo que sentía que su verga iba a reventar que quería metérmela. Yo me carcajeé por su comentario. Le dije que no iba a dejar que me lo metiera. De nuevo su frase solo la puntita. Yo le repetí que no iba a dejar que me lo metiera, pero me subí la falda y le dije que si quería podía restregarme su verga en las nalgas y panocha solo por arriba de mi ropa interior, el acepto, me incline sobre el lavabo y sentí su verga mojada untándose en mis nalgas y bajando en mi panocha arriba de mi ropa interior, yo igual estaba mojadita, no sé si él se dio cuenta. Me apretó las nalgas y comenzó a hacer un lado la tanga, pero lo detuve, me dijo que quería vérmela. Entonces le deje que me hiciera a un lado la tanga, de nuevo untaba su verga en mis nalgas, y me decía déjame meterla. Sentí su verga rosando mi panocha desnuda y se estaba metiendo pero yo me separe diciéndole que no, ya era mucho privilegio que le estaba dando. Él me dijo que se la mostrara, solo se masturbaría viéndomela, de nuevo hice un lado la tanga y el comenzó a jalársela.  Me excitaba verlo caliente, casi arrancándose la verga a tirones. L dije que cerrara los ojos, que le tenía una sorpresa. Los cerró, yo me baje la falda y tome sus pantalones y me salí del baño, él me decía quedito que le regresara los pantalones asomándose en la puerta. Yo me fui carcajeando. Solo lo quería hacer sufrir un poco. Me fui a mi cuarto incluso me tome un baño, tome unos condones y fui a verlo con sus pantalones. Cuando abri el tenia seguro le toque y le avente los pantalones cuando me abrió, yo entre y el estaba un poco molesto. Le dije que no se pusiera los pantalones, se lo iba a recompensar. Comencé a chupárselo nuevamente. Me dijo que se iba a correr en mi boca imaginándose que era mi desea panocha. Se sorprendió cuando le puse el condón,  me baje el minishort que me había puesto sin ropa interior, y le dije métemela.

Sin pensarlo me la metió que hasta dio un sonido de placer de comercial de coca cola. Le dije que me perdonara pero a mi me gustaban las vergas a punto de explotar. El no hablaba solo me estaba cogiendo gimiendo y mordiendo los labios, sacaba la lengua diciendo “estas deliciosa”.  Comenzó a decir una serie de cosas que me encantaban, los que nunca se me olvidan era el de “tanto culo para mi verga” y el que me causo risa era el de “mucha manteca para dos huevos”. Se corrió yo le quite el condón y comencé a chupársela ya la tenía bien roja de la punta. Lastima que después de la eyaculación, perdió la erección quedando flácida, aun asi la metia en mi boca pero nada. Le dije que quería que me haga correrme, le pedi que me chupara la panocha, el comenzó a hacerlo, yo estaba super excitada que solo cerre los ojos y a disfrutar. Unos minutos después el ya la tenia de nuevo parada, dejo de chupármela y de nuevo me metio la verga. Estaba tan mojadita que lo sentía delicioso. Saque mis tetas y el comenzó a chupar. Yo lo abraze y comencé a apretarle la verga entre mis piernas. Es ahí donde tuve mi orgasmo, sin querer pegue un grito, pero el siguió cogiéndome hasta que también se corrió. Nos quedamos acariciándonos, incluso nos bañamos juntos. A medio baño que de nuevo se le para y contra la pared comenzó a darme. Terminamos y yo me fui  a mi habitación, el salió y se fue con el coche no sé a dónde, esa fue la primera vez que cogimos, desde entonces lo hacemos constantemente.  

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