Aquella experiencia
de mi primera orgia me tenía fascinada. Don Carlos se dio cuenta y me dijo que
se repetiría cuando se pudiera. Pues seguía cogiendo con él y con el vecino
constantemente. Pero la neta yo quería otra experiencia excitante. Fue como al
mes más o menos que don Carlos me dijo que había una reunioncita y que seguro había
sexo. Esta vez fuimos a una casa en una zona residencial que apenas comenzaba,
la casa donde fuimos habían a lado más casas pero parecían vacíos. Cuando entramos
ahí estaban sentados el vecino y la pareja que había visto en la orgia
anterior. Platicaban de trabajo y cosas así.
Como media hora y nadie más llegaba. Pero eso sí, la señora no espero
tranquila, le saco la verga a don Carlos y comenzó a jugarla mientras seguían los
otros platicando, después comenzó a chuparla, se veía que le encantaba pues la
dejaba toda babeada. La chupaba bien rico que deje de poner atención a la plática
y me quede viéndola, se me estaba antojando chupar verga a mí también. El vecino
se puso atrás de ella sin que ella dejara de chuparle la verga don carlos, le levanto el vestido y le dio
una nalgada ella no tenía ropa interior. Su esposo les decía cojan bien rico a
mi vieja que se lo merece. El vecino comenzó a cogerla, la señora comenzaba a
gemir y a pedir que no se la sacaran. El esposo de la señora se desnudó, con la
verga toda parada se sentó en el sofá y me dijo que llevara mis nalgas con él. Yo
me quite los jeans, quedándome solo con mi tanguita. El me jalò y me sento
sobre de el diciéndome que rico culo tienes chamaca. Sentí su verga entrar en
mi conchita haciendo un lado mi tanguita. Comencé a gemir, la verdad me
excitaba mas ver como don Carlos y el vecino se cogían a la esposa del señor. El
señor me dijo que quería meterlo en mi culo. Le dije que estaba bien, el
colocaba un aceite en su verga y yo me quitaba por completo la tanga. Después puso
aceite en mi culo, de nuevo me sento y de un tiron sentí su verga resbalar
hasta el fondo de mi culito. Mueve ese culo me dijo. Yo comencé a darle
sentones mientras el gritaba de placer. Era algo salvaje pero delicioso. A su
esposa ya la tenían totalmente desnuda cogiéndola con las piernas hacia arriba.
El señor saco su verga de mi culo y volvió a cogerme la panochita. Sentía mucho
placer por parte de él. Después me inclino sobre el sofá con las nalgas arriba,
me las abrió diciéndoles a los demás que culote se carga esta niña. Y me metió
su verga nuevamente por mi culo. El decía que no quería parar nunca que mi culo
era delicioso, yo le pedía que no parara que tenía mi permiso de romperme el
culo. Lamentablemente él se corrió. Peor no tardo y yo ya tenía al vecino sobre
de mí cogiéndome de perrito pero en la conchita. El señor estaba tendido diciéndole
que yo era una rica putita. Yo me corrí viendo a don Carlos echándole su
lechita en las nalgas de la señora. La señora estaba como desesperada pidiendo
que no pararan que quería más verga. El vecino pero el vecino ya se había corrido
conmigo. Fue su esposo quien le metió la verga nuevamente. Después todos
terminamos rendidos. Otra rica experiencia llegaba a su fin. El señor y su
esposa me dijeron que cuando quisiera fuera con ellos a coger. Eran una pareja
que disfrutaban mucho del sexo sin inhibiciones.
Me dieron su
verdadera dirección, donde Vivian para estar en contacto. El vecino fue el
primero en irse, don Carlos y yo nos
quedamos platicando con la pareja. Cuando él fue al baño, ellos me dijeron que cuando
quisiera ellos rentaban un cuartito en su casa, a mí no me cobrarían. Lo dijeron como en broma pero igual en tono
algo serio. Ya la señora me dijo que la esposa de don carlos lo estaba
empezando a celar conmigo y si tuviera problemas ya sabía. Pues la pareja me cayó
bien. En el camino le preguntaba a don Carlos si era cierto lo de su esposa, me
dijo que si. Yo le dije que no habría problema si un día me salgo de su casa,
el dijo que lo iba a solucionar con su esposa. Y pues así quedamos
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