22. KARLA una experiencia algo perturbadora


Hace una semana un primo mío me invito a su casa a pasar los días de descanso. Él es el hijo de la hermana de mi mamá, y pues cogemos desde que yo tenía 18 y el 27 años. La idea de su invitación, era pasarla juntos una semana sin inhibiciones. Él está separado de su mujer desde un año y tiene un hijo de 14 años. No sé si es de familia, mi primo es un hombre bien sexoso. Su mujer lo dejo porque lo descubrió en la cama con dos de las mejores amigas de ella. Cuando empezamos a coger él ya estaba casado.
Lo malo fue que su hijo quiso pasarlo con él, y el no pudo decir que no.  Por lo que el plan estaba arruinado. Para terminarla de fregar, uno de los amigos de mi primo también fue de improviso. O sea, eso de quedarnos solos estaba en chino. Afortunadamente mi primo tiene una casa grande, por lo que ahí me dio hospedaje sin importar que su hijo y su amigo estuvieran ahí de imprevistos. Como mi primo no podía salir ya el segundo día, su amigo y yo salimos de fiesta, bailamos y nos divertimos un buen. Nos caímos bien y terminamos cogiendo en el coche. No fue nada especial, en la parte trasera del coche me acostó sin desvestirme me abrió y haciendo un lado mi ropa interior comenzó a cogerme. Termino rápido, tiro el condón por la ventana y a seguir la fiesta. Yo me estaba emborrachando cañón, mi primo nos habló algo tomado también, su hijo se había dormido y quería verme. Pero la verdad no me intereso, seguimos la fiesta su amigo y yo. Ahí me emborrache tanto que no recuerdo que más pasó. El caso es que desperté toda cruda en la cama. Estaba con el vestido arriba, sin calzones con las nalgas por fuera. Supe que me habían cogido, pues mi vestido era de licra, y había manchas de semen en él. Me eché un baño y Baje a desayunar, ahí estaba el amigo de mi primo, le pregunte si cogimos nuevamente. Él me dijo que no, él se durmió llegando. Más tarde le hice la misma pregunta a mi primo, él dijo que si entro a mi cuarto, y que me dio una cogida mientras estaba dormida. Yo le dije que gacho, al menos me hubieras subido otra vez el calzón. Él se carcajeo, diciéndome  que me conocía bien, y me cogió con condón y me puso nuevamente la pantaleta. Yo le dije que era mentiroso, pero el juro que era cierto, me dijo seguramente te lo quitaste después solita para meterte mano. Yo me carcajee, pero no creo, pues yo borracha soy una piedra cuando duermo. A los dos días nuevamente me emborraché, después de todo ya estaba en confianza. Y para mi sorpresa, desperté con la tanga abajo. Ahí si me pareció raro. Fue ahí donde comencé a sospechar del hijo de mi primo, pues la verdad apenas tenía 14 años. Pero es la edad de la calentura. Pero después me dije igual fue su amigo o el, pero me pregunte por que lo harían mientras estoy borracha y dormida  si me pueden coger en los cinco sentidos.
Hice la prueba. Al día siguiente puse una camarilla en mi habitación. Como siempre me fui de parranda. Ese día desperté bien, no sucedió nada. No me di por vencida, así lo hice hasta el tercer día. Lo puse nuevamente, me fui de fiesta, (me la pase de borracha esa semana jaja), estábamos mi primo, su amigo y yo. Mi primo logró ir, pues su hijo estaba con sus amigos y llegaría en la madrugada. Estuvo padre la fiesta. El caso es que mi primo se ligó a una negra americana con las nalgas bien grandes como le gusta jaja. Y le seguí con la fiesta con su amigo. Recuerdo que cogimos nuevamente en un estacionamiento. Y después paseamos tomándonos unas copas, los dos nos emborrachamos, terminamos yendo en taxi a la casa. Donde seguimos con unos tequilitas. Y de ahí el cotorreo. Nuevamente desperté en mi cuarto con el típico dolor de cabeza que parecía palpitar una y otra vez. Tenía, la tanga y el sostén mal acomodado. Dije “ya cayó el duende cogelon”.
Cuando vi la grabación efectivamente, el duende cogelon, era el hijo de mi primo de apenas 14 años recién cumplidos. Mientras estaba dormida, el entró a mi cuarto, cerró la puerta al parecer con seguro y de inmediato se quitaba los pantalones dejándose desnudo por abajo  con el pene erecto. Se subía cuidadosamente en la cama, me subía el vestido, me bajaba la tanga un poquito, y comenzaba a acariciar mi vagina, me volteaba boca abajo mientras me quitaba la tanga completamente. Hundía su rostro en mi trasero, mordía mis nalgas, se veía bien excitado mientras me las apretaba. Después nuevamente me ponía boca arriba, se ponía un condón, y me jalaba a la horilla de la cama mientras me abría las piernas, creo que yo estaba un poco consiente pero no recuerdo nada. El me penetraba con las piernas abiertas, en una ocasión yo gemí como sintiendo placer, él no se detenía, se acostó sobre mí sin dejar de moverse, y metió sus manos en mi escote sacándome los pechos que comenzó a chupar de inmediato. Despacito escuche que decía que con razón era la puta de su papa, tenía la empanadita deliciosa. Ahí supe que él sabía que su papá y yo cogíamos. Después me volteo boca abajo y comenzó a cogerme en esa posición, me di cuenta que también estaba grabando con su celular el muy carbón. Después se quitó el condón y siguió jalándose mientras me observaba las nalgas, terminó corriéndose sobre ellas.  Me limpio su semen, y con algo de trabajo (por qué me movía mucho) me puso de nuevo mi pantaleta.
Obviamente cuando estaba solo lo enfrente, le mostré mi grabación algo molesta. Él me dijo que ya me había visto coger con su papá antes de que terminara con su mamá. Y después vio a su papa cogiéndome dormida días atrás sin que yo hiciera nada.  Como vio que era fácil él también lo intento cuando su papá se durmió.  Lo dijo tan tranquilamente que me sorprendí. Me dijo que se dio cuenta que cuando me emborrachaba era fácil cogerme. Le dije que no volverá a suceder, él dijo que estaba bien, que se sentía bien al coger al amante de su papá. Así sin pena se levantó y se fue. Dije, si yo estaba loca, este chavillo los estaba aún más. No estaba nervioso, o arrepentido, solo tranquilo. Los días que quedaron no me emborrache. Si cogí con mi primo  una vez más. Una experiencia inquietante la verdad. 

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