En estas últimas vacaciones me fui en un placentero viaje. Una amiga me invito a quedarme en su casa en puerto Vallarta. Pues con ella nos conocemos desde mucho, desde que ella era soltera. Ella es tranquila y no sabe que me encanta el sexo. Nunca se lo he dicho porque ella es de una familia muy católica. El caso es que si lo hubiera sabido no me hubiera invitado. Pues ella está casada desde hace 7 años, y pues su marido no es guapo, es calvito con pancita jaja, pero el sexo es el sexo. Cuando llegue pues me instale en su casa que es muy grande. El primer día la pase con ella en el chisme. Todo marchaba bien. Obviamente me fije que su marido que siempre me describía como un hombre derecho y que no tenía ojos para otra mujer que no fuere ella, no era exactamente eso. Era otro hombre más, pues ella no se percataba tal vez, pero me di cuenta que cuando tenía la oportunidad me comía con la mirada. Cuando entraba a bañarme, el solo me observaba desde la sala. O cuando platicaba con mi amiga mientras cocinábamos algo, el volteaba a verme a cada momento. Pues la verdad esa situación me fue gustando, que me empezó a llamar la atención. No sé si él se dio cuenta, o simplemente actúa así, pero no se conformó solo con ver. Yo me levantaba muy temprano a hacer un poco de ejercicio. Cuando llegaba mi amiga seguía durmiendo. Pero su esposo estaba en la sala viendo la tv. Me decía cosas como; te ves bien en esos pants deportivos o cosas así. Yo haciéndome la inocente le decía gracias. Ese día me pregunto cómo me había ido con el ejercicio, yo le dije la mentira de que me había lastimado la pierna. El de inmediato me dijo que con un masajito se quitaba. Le pregunte quien daba masajes, él dijo al instante; yo te puedo dar masaje me hice la indignada para jugar un poquito preguntándole si me estaba coqueteando a pesar de que era la amiga de su esposa. Él lo negó, me salió con la excusa que solo trataba de ser amigable. Le dije que prefería echarme un baño. Cuando Salí de la ducha mi amiga ya había despertado y pues de nuevo la pasamos juntas todo el día. Esa noche yo estaba en mi habitación cuando su esposo toco, cuando paso me dijo que venía a pedirme disculpas por el malentendido de la mañana. Yo me portaba como si fuera la mujer más pura del mundo jaja, diciéndole que no se preocupara. Cuando se estaba marchando le dije que viendo que era sincero (aunque yo sabía que no lo era). Le pedí que me diera ese masaje, como amigos. Traía una minifalda, por lo que el al instante acepto. Jalo una silla y me puso el pie sobre la silla mientras yo estaba sentada en la cama. De inmediato empezó según el a masajearme la pierna. Mientras tanto le pedía disculpas por pensar cosas que no eran y pensar mal de él. Jaja él decía que no había problemas, pero claramente veía que estaba disfrutando más el masaje que yo. Le pregunte por mi amiga él me dijo que se estaba tomando un baño. Aprovechando eso le dije sensualmente "que rico masaje" el solo se reía. Empecé a gemir despacito diciéndole que rico. Le pregunte si mi amiga se tardaría, él me dijo que ella siempre se tarda un chingo. Yo ya estaba caliente, le pregunte si había tiempo para que me masajeara otras cositas. Él se me quedo viendo, mientras yo le abría las piernas frente a él. Le dije "masajéame mi conchita" el subió su mano lentamente y comenzó a sobar mi vagina sobre mi ropa interior, yo lo sentía delicioso, sus manos sobándome mi conchita se mojaba cada vez más. De inmediato se bajó los pantalones desesperado diciéndome que teníamos chance para un rapidin. Yo le dije que estuviere tranquilo, solo quería una sobadita y nada más. El me movía su cosa diciéndome que si no lo quería todo. Me levante me fui a mi bolsa y saque un condón para que se lo pusiera. El al instante se emociona más sabiendo que lo había logrado. Se puso el condón yo le puse seguro a mi puerta y me acosté en la cama boca arriba con las piernas abiertas. El al instante se me trepo, hizo a un lado mi pantaletas y me metió su cosota hasta el fondo en un solo empujón. Yo trataba de no hacer ruido, pero estaba riquísimo, más me excitaba saber que mi amiga estaba en el baño a unos metros de nosotros. El me cogía desesperadamente, mientras yo habría más las piernas para él. No quería que acabara mi vagina se mojaba más resbalando mejor su cosota. Lamentablemente oímos ruidos en el pasillo sabiendo que mi amiga había terminado de bañar. Rápido nos despegamos. Yo Salí del cuarto para platicar con mi amiga y distraerla para que no viera a su esposo salir de mi cuarto. Ese día fuimos al antro el emborrachaba a mi amiga para dejarla indispuesta. Cuando llegamos mi amiga ya borracha estaba dormida, el la llevo a su habitación, yo me senté en la sala, cuando salió me sorprendió pues ya estaba totalmente desnudo. Le dije que en la sala no, pero él me dijo que su esposa cuando estaba así, dormía como piedra. Se sentó en el sofá con la cosa toda parada y venosa. Yo comencé a chupárselo, estaba rica y húmeda. El me agarro y comenzó a desnudarme, rápido me bajo el vestido. Después me bajo el sostén y comenzó a chupar mis pechos, mientras sus dedos sobaban mi conchita. Yo hice a un lado mis pantaletas nuevamente, y lo monte metiendo su cosa en mi vagina. El comenzó a cogerme mientras chupaba mis pechos y apretaba y abría mis nalgas. Me dijo que gimiera que gritara, que eso le excitaba, pues su esposa no despertaría. Yo así lo hice comencé a gemir y a gritarle "cógeme, métemelo lo quiero todo" el también gritaba diciéndome "mueve ese culo", los dos gemíamos y hacíamos un escándalo, yo por la excitación de la situación sentía mi vagina derretirse. En la sala estuvimos cogiendo y cogiendo sabiendo que mi amiga estaba en su cuarto dormida. Después de la posición de caballito, hicimos el perrito cobre el sofá, el comenzó a metérmelo por mi colita. Que rico culo gritaba, yo gemía bien rico, después le siguió otra vez por mi vagina. Yo me corrí, pero él siguió cogiéndome como si no hubiera un mañana. Después de unos momentos él se corrió. Pero le seguimos sin importar que estuviera amaneciendo. Yo le puse el alto, pues él hubiera seguido. Nos fuimos a bañar juntos, el me lavaba mi conchita con su lengua, un rico sexo oral donde sentía su lengüita metiéndose en mi rajita. Después solo nos fuimos a dormir. Ese día dormimos casi todo el día. Pero en la tardecita mi amiga me despertó para seguir turisteando. Pero antes de irnos. Yo estaba viendo que ropa ponerme, cuando su esposo entro diciendo que mi amiga nuevamente se había metido a bañar. Le puso seguro a la puerta se puso el condón, y me tiro en la cama boca arriba, solo me bajo la pantaletas, subió mi vestido, me abrió las piernas y comenzó a cogerme, ahora los dos calladitos gimiendo y disfrutando. Su pene me satisfacía cuando me lo metía y sacaba en mi conchita toda mojada, yo movía las caderas pidiéndole al oído más y más. Él me dijo que me preparara pues cada vez que hubiera la oportunidad me cogería. Ahí los dos nos corrimos, justo a tiempo, unos minutos antes de que mi amiga terminara. Otra vez yo rápido me limpie por lo mojada que estaba mi vagina y salí a distraerla. Toda esa semana estuvimos igual. Cogiendo cada vez que podíamos, lástima que se pasó rápido. Solo lo hacíamos cuando mi amiga bañaba, o salía unos momentos, porque en lo general nunca nos dejaba solos al 100%.
Comentarios
Publicar un comentario