Pues que les cuento sigo teniendo sexo con mi sobrino. Pero la semana pasada paso algo que no me esperaba. Fui a visitar a mi hermana como siempre y así ver a mi sobrino. Cuando llegue ella estaba de salida diciéndome que bueno que llegaste para ver por su hijo. Me dijo que se tardaría pues se iba en un viaje de ida y de regreso el mismo día. A mí eso me emociono pues la idea de estar con mi sobrino me calentó mucho. Pero cuando entre, él estaba con tres amigos más de su misma edad. Yo dije chin ya no se me hizo. Entre, salude normal y me presento como su tía. Note que los pubertos se me quedaron viendo, pues era normal en chavos de su edad. Les pregunte si querían algo de comer, me dijeron que no, de todas formas yo fui a ver que había para cocinar algo. Mientras hacía algo de comer me daba cuenta que ellos susurraban. No le di mucha importancia y seguí con lo mío. Cuando me fui al patio trasero, no me di cuenta que mi sobrino me siguió y ahí me dio una nalgada diciéndome tía quiero cogerte, pero mis amigos no se van. Le pregunte ¿Qué tal si te chupo en el baño?, él dijo que le daba pena con sus amigos en la sala. Le dije que mi conchita quería coger. El solo se rio. Se fue de nuevo con sus amigos. Después mi sobrino y uno de sus amigos se fueron a comprar botanas. Solo dos se quedaron jugando videojuegos. Me di cuenta que seguían susurrando, por lo que me acerque para poder escuchar sin que se dieran cuenta, y claramente escuche que hablaban de mí, al parecer mi sobrino les había contado a sus amigos lo que sucedía entre nosotros. Y decían "no le creo que se haya cogido a su tía, solo esta choreando seguro es virgen el guey" Sali y les pregunte de que estaban hablando. Ellos se asustaron mucho, diciendo que no hablaban de nada. Les pregunte si mi sobrino les andaba diciendo que tenía relaciones con migo. Ellos no contestaban solo se quedaban callados. Uno de ellos era más valiente, me dijo que mi sobrino les conto que teníamos sexo, de cómo lo hacíamos y que a escondidas para que no se enteraran nadie. Les dije casi regañados que si eso fuera cierto, no creerían que estuviera mal que estuvieran susurrando eso, que tal si otro lo escuchara y pensara mal de mí. Ellos solo me veían nervioso. Les dije que no vuelvan a decir eso. Ellos dijeron que estaba bien. Y para no dejar mal a mi sobrino les dije, guarden el secreto, pero si mi sobrino y yo tenemos relaciones. Ellos se sorprendieron como no creyéndolo. Al instante su bulto creció por delante. Se me metió la loca idea de coger con ellos. Les empecé a explicar cómo mi sobrino efectivamente me metía su pene en el fondo de mi vagina y que ambos lo disfrutábamos. Y les explicaba como el me sobaba los pechos, mientras yo me los agarraba frente de ellos. No se cómo me Salí de control ya no pensaba, esos ratos que mi calentura me superaba. Les dije que me encantaba chupar el tronco de mi sobrino, que si querían que les muestre como se lo chupaba, ellos dijeron que sí, no fue difícil convencerlos. Les dije que se bajaran los pantalones. Ellos lo hicieron, me agache y comencé a chuparles sus cosas que estaban bien paradas. Les lamiaba la puntita mientras jugueteaba con las manos con el otro. Ellos estaban emocionados diciendo que su fantasía estaba por cumplirse. me dijeron que querían cogerme, que no dirían nada, sería un secreto. Me senté en el sofá y les dije quién me chupe mejor mi peluchito me coge. Abrí las piernas y me quite la pantaletas y me acariciaba las piernas frente a ellos. Elegí a uno, se acercó y comenzó rápidamente a chuparme mi conchita, parecía que quería devorarme, su lengua se metía muy adentro, el otro estaba desesperado. Le dije que seguía el otro. Se acercó y siguió chupando, a mí me encantaba, el morbo de la situación hacia que mi peluchito se mojara más, mesclado con la saliva de ellos, sentía derretirme.
Tanto me enloquecí que comencé a quitarme el vestido ajustado que traía, me quede solo con mi sostén. En mi bolsa saque los condones que tenía listo para mi sobrino y se los di. Me apoye sobre la barra de la cocina con la colita arriba diciéndoles que me cogieran como quisieran. Al instante sentí como el pene de uno de ellos se metía en mi mojada vagina, resbalaba rico comencé a gemir de placer. Le dije al otro que se sentara en la barra. Lo hizo y comencé a chuparle su pene húmedo y rico. El otro me nalgueaba y me cogía, yo le decía métemelo al fondo, el empujaba más. En ese momento la puerta se abrió, era mi sobrino y su otro amigo. Les dije vengan los quiero a todos cogiéndome. Su amigo de mi sobrino de inmediato se empezó a desnudar. Y se acercó con su pene para que selo chupe. Yo estaba un poco incomoda, por lo que me acosté en la alfombra le dije a uno que se acercara para que se lo chupara, él se agacho con su cosita en mi cara, comencé a chupárselo, hasta sus bolas succionaba y lamia, el gemía de placer, otro me levanto las piernas y las puso sobre sus hombros y comenzó a cogerme, todos se reían y bromeaban diciendo quien se corría primero daba 1000 pesos a los otros. Yo les dije "cójanme como quieran, hoy soy su puta, experimente conmigo" el otro se acercó y comenzó a chupar mis pechos, yo estaba fascinada, una cosota en mi boca, otro chupándome los pechos y otro cogiéndome delicioso. El que me cogía comenzó a chuparme la vagina, yo estaba en éxtasis sintiendo sus manos por todo el cuerpo que sudaba de placer. Me voltie a gatas y comencé a chupar la cosa del que me cogía, el que tenía su pene en mi rostro ahora comenzó a coger. Y el que chupaba mis pechos, lo seguía haciendo, ahora acostado debajo de mí. Como ordeñándome con la boca. Al que me cogía le dije "métemelo por el culo bebe" el al instante obediente me lo metió suavemente, mi cuerpo se erizo. Él me decía que se comería mi culo toda la noche los tres gritaban de placer, me apretaba mis nalgas, el otro no sacaba mis pezones de su boca como bebe recién nacido, uno quería sacar su celular para grabar, pero le dije que no me gustaba que graben. Mientras estaba de perrita con un macho por detrás, uno por enfrente y por debajo. Vi que mi sobrino no estaba. Estaba tan caliente que no me di cuenta. Le pregunte a uno de sus amigos, pero no me contesto seguía diciendo rico, rico. El que me cogía en mi culo se corrió. Les dije que quería doble penetración. Le dije a uno que se acostara. Me agache sobre su pene, comencé a untarlo en mi vagina, y a rosarlo con mis nalgas. Después lentamente me lo metí por atrás, me acosté dándole la espalda a el, mientras el agarraba mis pechos, otro se subió arriba y comenzó a cogerme por la vagina. Yo gritaba con las piernas arriba sintiendo ese rico sexo, pero ellos no duraron, el de abajo se cansó al mismo tiempo que se corría. Solo me subí por arriba del que quedaba montándolo, pero al poco rato también se corrió. Después los tres me abrazaban y besaban por todos lados, como zombis sentía sus manos recorrer mi cuerpo, mis pechos, se metían en mi vagina y en mi culo, acariciaban mi espalda y mi cuello, eso me encantaba, yo abiertita queriendo más, y ellos tocándome a placer. Pero ahí me controle un poco y les dije que ya habíamos terminado, ellos no querían, pero yo les insistí.
Después de eso les dije que se fueran, ellos querían seguirle, pero yo ya no. Cuando se fueron fui a ver dónde estaba mi sobrino. Estaba en su cuarto, pase y le pregunte que pasaba, él estaba molesto, y me dijo que le molesto que sus amigos me cogieran. Yo le dije que estuviera calmado que el sexo se debería disfrutar sin tapujos. Le dije que se parara, cuando lo hizo le di un abrazo. Yo estaba todavía desnuda y con el sudor del ajetreo. Él puso su cara sobre mi cuello y su cuerpo acariciaba mi cintura y mis caderas desnudas y húmedas. Le dije que si quera coger. Él dijo seguramente te llenaron de semen, le dije que usaron condón. Le dije que para compensarlo, él podía cogerme sin condón y correrse donde quisiera. Él se bajó los pantalones, yo le quite la camisa. Ahí parados me dijo que abriera las piernas, y me introdujo su pene en mi conchita. Algo rico. Comenzó a cogerme sin parar. Me acariciaba mis pompas y metía su dedo en mi culo. Chupaba mis pechos. Me apoye la espalda en la pared y levante ligeramente mi pierna derecha, para que metiera al fondo esa cosota que tanto me gustaba. Yo gemía de placer cuando sentía la penetración y su cuerpo desnudo resbalando con el mío, fue donde él dijo tía estas bien rica, seguido de un "tía te amo, ojala un día seas solo mía". Yo me sorprendí, pero deje que siguiera cogiéndome. Me lamiaba mis pechos y seguía repitiendo esas palabras con un tono muy serio. Después de unos momentos sentí su líquido caliente en mi vagina. No me preocupaba por que yo estaba con anticonceptivos. Pero lo que si me preocupaba era lo que él me había dicho. En fin que termino y se me abrazo, le dije que me iba al baño, el me siguió. En el baño de nuevo me agarro y comenzó a cogerme empinada al lavabo de nuevo por mi vagina llena de lechita. Yo gemía, el placer era enorme, veía en el espejo como el me cogía por detrás. Mis pechos revoloteaban el sudaba igual que yo. Los dos estábamos en éxtasis. Ahí me corrí, pero él le siguió hasta que de nuevo me hecho otra ración de líquido caliente dentro de mi conchita. Nos metimos a bañar. Comimos y de nuevo lo hicimos en la recamara. Esa noche mi marido fue por mí, ya que le había avisado que mi hermana llegaría tarde, y fue a buscarme cuando mi hermana había llegado. En el coche mi esposo platicaba, pero yo estaba pensativa, y lo sigo estando, está bien rico el sexo con mi sobrino, pero algo me dice que ya no lo está viendo como simple sexo. Si sigue así creo que tendré que dejar esto por la paz.
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