14. ANA JULIA sobrino

Pues que le cuento sigo loca. Sigo cogiendo con mi sobrino hijo de mi hermana. La semana se quedo a dormir en fin de semana, mi esposo se fue de viaje de trabajo y mi hijo a un campamento, por lo que le dije a mi hermana que me daba miedo quedarme sola con mi hija. Pero ella misma me ofreció que su hijo se quedara a acompañarnos. Yo acepte con gusto ya tenía ganas de un buen sexo. el llego y frente a mi hija nos portábamos normal. Mi hija que he estado descubriendo que igual le encanta el sexo, pero no me adentrare mucho en ello. Simplemente hay cosas que todavía no le digo. En fin actuábamos normal como tía y sobrino, afortunadamente unas amigas de mi hija la pasaron a buscar para ir a la plaza, ella se marcho por toda la tarde. Yo estaba fascinada, no sé que me sucedía estaba extasiada como si nunca hubiera tenido sexo antes. Apenas vi que mi hija se subió al coche de sus amigas, yo cerré y me fui hasta donde estaba mi sobrino, me lo encontré en el patio de atrás jugando con el cachorrito. Rápidamente lo agarre por la espalda y empecé a acariciarle por encima del short, le decía quiero que me cojas ahora mismo. Afortunadamente tenía un short deportivo, por lo que de un movimiento se lo baje hasta la rodilla con después desesperada hice lo mismo con su ropa interior, sentí como quedaba dura su cosa en cuestión de segundos. Se lo agarre desde el tronco mientras le mordía la oreja a él. Empecé a jugar con su pénele tocaba la puntita ya húmeda. El gemía de placer cerrando los ojitos. Se dio la media vuelta y yo me baje a chupárselo. Estaba delicioso no quería despegarme de él, estaba yo bien caliente como nunca lo lamiaba, lo chupaba, lo restregaba en mis labios, cachetes quería prácticamente devorarlo. En un segundo se corrió en mi cara, todavía teníamos ese problema de que se corría muy rápidamente. Pero no me importo. Me dijo que yo era la primera mujer y que se estaba enamorando de su propia tía. Le dije que no dijera tonterías. Me subí el vestido y me baje la ropa interior, me recargue en un tinaco que estaba ahí, parando la colita hacia él, le dije que me lo metiera por el culo, al instante me agarro las nalgas empezó a besármelas pronto sentí su pene metiéndose en el culo, me dolió un poco, pero estaba tan húmedo su pene que resbalo de inmediato. Ahí arremetía contra mí cogiéndome una y otra vez. Yo trataba de no gritar tan alto, ya que en el patio los vecinos podían escuchar. El único testigo era el cachorrito que andaba alrededor de nosotros, pero él seguía cogiéndome y rompiéndome el culo. Me di cuenta que estaba tardando en correrse, buena señal. Después de un sopetón su cosa se desvió a mi vagina una cosa deliciosa. Le dije que entráramos, pero él quería seguir ahí. Y ahí en el piso me acostó me levanto las piernas y empezó a cogerme, los dos acostados y empolvándonos, pero no nos importaba, seguíamos cogiendo una y otra vez, mi espalda estaba blanca pero el acariciaba mis pechos me las chupaba mientras yo tenía las piernas abiertas al aire recibiendo sus envestidas, que rico fue hacerlo en un lugar abierto. Se corrió nuevamente sobre mi pierna, mientras las apretaba. Después fuimos a la sala a seguirle. Calculamos la hora en que mi hija vendría, ahí paramos. Cuando ella llego el estaba viendo la tele, y yo preparando la cena. Lo que queríamos ahora era que ella se durmiera. Pero mi hija siempre dormía tarde, se encerraba en su cuarto y estaba hasta horas de la madrugada en su computadora. Sabiendo eso aquella noche me levante solo con una bata blanca sin nada abajo. Camine por el pasillo lentamente para que mi hija no escuchara, sabía que ella no saldría del cuarto, así que me cole hasta donde mi sobrino estaba dormido, entre y le puse seguro a la puerta, el estaba despierto viendo la televisión. De inmediato me quite la bata quedándome totalmente desnuda, el dijo Tía es usted una golosa, yo le dije que delante de las personas me tratara así con respeto, que en la intimidad podía llamarme como él quisiera. Me acerque a su cama y el se sentó y su lengua fue directo a mi vagina, la chupaba rico, se bajo el short y yo me trepe sobre él. Con cuidado para que la cama no rechinara. Me abría las nalgas y me lo metía lentamente, yo ya estaba mojada, el me dijo que se me sentía rico así. Pero la cama empezó a rechinar, por lo que mejor bajamos nuevamente al suelo, ahora alfombrado. Se sentó sobre el suelo y yo me senté sobre él, empecé a darle sentones mientras el jugueteaba con mis pompas, metía los dedos en mi culo, me nalgueaba dándome las gracias por prestarle ese culo hermoso. Yo gemía bajo para no hacer mucho ruido, pero todo lo que me decía me excitaba, cosas como "tia trágatela toda con tu rica concha" "yo le pedía que me destrozara la concha quería mas, que era mi sobrino consentido "pero lo que repetía una y otra vez era "que rico culo tia" muévelo, "en ese culo si se van hasta mis huevos", me di cuenta que a él le excitaba decirme cosas así, yo le contestaba cosas como métemelo todo, eso sí es una verga de semental rico, quiero toda tu leche papi, me estas rompiendo la torta, lo quiero todo, Lo que se me ocurriera, obviamente él se excitaba bastante. Incluso yo me corrí, después el lo hizo. Asi seguimos la noche. Sind arme cuenta nos dormimos juntos en el piso. Mi hija en la mañana toco en su habitación yo rápidamente me escondí en el closet, el semiabrio la puerta, mi hija preguntaba si no me había visto, el dijo que no. después que mi hija se fue, yo me Salí del cuarto al baño. Afortunadamente no nos cacharon.